Llegamos con el pequeño bote a una especie de zona baja en los Esteros del Ibera. Algo así como 2 mts. de profundidad y visibilidad perfecta, aun hoy me sigue sorprendiendo que el agua de este lugar sea tan clara como la de los ríos de la Patagonia. Aunque la diferencia se nota, es Octubre y el calor es intenso, gorro con vicera, anteojos y camisa manga larga son casi una regla aquí. El lugar es como una laguna que se forma después de la desembocadura de un riacho, el agua corre lento para después de unos 120 mts. volver a formarse el riacho que después de mucho fluir se convertira en el Río Corrientes, pero como dije antes en este lugar la profundidad era poca; menos de 2 mts lo cual deja ver claramente el fondo. Estoy usando mi caña para Dorados grandes, una Sage 890 traveler de 9 pies para línea 8, el reel es un Hardy y la línea es un shooting taper IV de 6 metros y medio usado con running line, la mosca es una especie de muddler 2/0 atada "low water" (con muy poco material y cabeza chica) toda negra con algo de flashabou pearl. Hago un cast bastante largo (25 mts aprox.) y comienzo a recoger rápidamente para evitar que la mosca se hunda demasiado y se enrede en las algas del fondo, poco tiempo paso, quizás 7 strips, y siento una brusca frenada en la línea, levanto la caña para clavar lo que sin duda parece un pique, pero la fuerza del pez que esta ahí abajo no me deja hacer el recorrido completo para clavar el anzuelo, el dorado salta instantáneamente justo enfrente mío, y de inmediato los 3 ocupantes del bote tuvimos la misma reacción "es un mounstro!" pensamos.

        Automáticamente después de el salto, el dorado comenzó una corrida imparable aguas abajo hacia donde el riacho volvía a formarse, intente clavarlo una vez mas, ya que me atemorizaba el hecho de que no pude clavarlo firme en el pique, pero solo intente esta acción una vez por que el dorado seguía corriendo a toda velocidad. Por un momento quede perplejo mirando al dorado correr y correr, y correr... cuando atine a mirar la reserva de backing solo me quedaban unos 30 mts. así que del susto inmediatamente intente frenarlo con el rim control del reel, lo único que logre fue quemarme la yema de los dedos...el dorado seguía corriendo, con menos de 25 mts. en el reel empezaban los preparativos para levantar el ancla, pero perder control con el pez no me gustaba, siempre pensando en la débil clavada que había podido hacer en el momento del pique, así que junte coraje pense en los 20 mts. que me quedaban en el reel y esta vez con la palma de la mano prácticamente detuve el carrete por completo, el dorado sintió la frenada y comenzó a revolcarse, por suerte tener tanta línea y backing fuera amortigua bastante las acciones del pez impidiendo que el tippet se corte, al verse "atrapado" y cansado de la larga carrera el dorado subió como un rayo a la superficie y salto esta vez a mas de 100 mts de donde estaba el bote, ese espectáculo fue increíble.

        En cuanto estaba todo listo para levantar el ancla y comenzar a seguirlo, al dorado se le ocurrió volver sobre sus pasos, otra vez como un bólido, lo que me obligo a mi a recoger backing a una velocidad inaudita. Por suerte no llegamos a levantar el ancla, sino hubiera sido una catástrofe; nosotros yendo con la corriente aguas abajo y el dorado remontando a toda velocidad, metros y metros de línea floja..., imaginen lo que hubiera sido eso.

        Pero por suerte nada de eso ocurrió y ahí estaba yo peleando en el real sentido de la palabra con el pez mas grande que había clavado hasta ese momento en toda mi vida, por suerte el dorado cambio el ritmo de la lucha y se clavo y se fue al fondo a 40 mts. del bote, los últimos 15 minutos fueron un tire y afloje entre el dorado y yo, rogando que nade le pase al tippet o al anzuelo, metro a metro logre arrimarlo al bote hasta que por fin lo levantamos. Sin duda fueron los 25 minutos mas largos que viví, y los 10 primeros con una intensidad que nunca hubiera imaginado. Por supuesto después de semejante lucha tome al pez exhausto y lo devolví al lugar donde nació: el riacho de los Esteros del Ibera...

        Después en otros artículos de esta misma pagina podrán leer mis conclusiones acerca de este sorprendente pez que es el dorado, aquí yo solo quise contarles cual fue una de las 5 luchas con peces mas duras a las que me enfrente hasta ahora en mi historia de pescador. Ojalá muchos tengan la oportunidad de encontrarse con luchas de dorados como esta.